lunes, 5 de abril de 2021

Recibir un diagnóstico de VIH puede ser la peor noticia del mundo. Es común sentir rabia, miedo, confusión, conmoción, pena, depresión y otras emociones desagradables. Incluso cuando ya ha pasado un tiempo y cree que está empezando a asumir la noticia, puede que vuelva a afectarle. El primer paso para superar este período difícil es entender que estos sentimientos son respuestas normales a su diagnóstico. Ignorarlos no los hará desaparecer. De hecho, ignorar o resistir cómo se siente es una de las mejores maneras de ayudar a esas incómodas emociones a continuar. Al principio, puede parecer que una prueba positiva es una sentencia de muerte, pero esto no es verdad en absoluto. Hay vida después de una prueba positiva. De hecho, muchas personas que viven con VIH (VIH+) llevan una vida plena y saludable. También es posible que sienta que ahora está dañado de algún modo y que nadie la va a querer porque vive con VIH. O es posible que se culpe a sí mismo por contraer VIH y se pregunte: "¿Cómo pude dejar que esto me sucediera?" Intente ser considerado consigo mismo. La culpa y la vergüenza pueden ser destructivas. Intente tener compasión y perdonarse si es necesario. Acaba de recibir malas noticias y le esperan cambios y desafíos. Si perdonarse a sí mismo o tener compasión de sí mismo le resulta difícil, intente imaginar cómo le hablaría a un ser querido que le acaba de decir que vive con VIH. Piense en el amor y el consuelo que usted le daría a esa persona y comparta un poco de esto consigo misma. Usted merece dar y recibir amor, y es tan capaz de ello como nunca. #vif https://instagr.am/p/CNSNpDBLlQ3/


0 comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.